Como docente, su mayor aporte es haber mantenido una marca y un restaurante por 23 años, ofreciendo platos típicos ecuatorianos y en especial quiteños. Su perfecto maridaje entre turismo-paisaje es Limpiopungo en el Parque Nacional del Cotopaxi, el volcán activo más alto del mundo.
Su fiesta popular-celebración nacional son las Diabladas de Píllaro, receta criolla-plato emblemático es la fanesca de doña Lola, mi mamá con todos los granos pelados y su producto estrella es el hornado quiteño. Su sueño para convertir al país en una gran destino culinario es que los sabores del Ecuador se difundan a través del mundo y que nuestra cocina tenga protagonismo mundial. Debido a la variedad de productos, la gastronomía ecuatoriana es muy amplia, llena de sabores y aromas que ofrecer.
Cada región cuenta con platos típicos que la representan, así tenemos los locros de la región interandina, los biches y cebiches de la Costa y todos los platos amazónicos con la yuca como ingrediente principal. Esa diversidad de regiones y platos debe ser conocida en todo el mundo. Para ella la cocina ecuatoriana es la pasión de su vida, sus sabores y aromas están estrechamente ligados a sus recuerdos y añoranzas, puesto que fue su abuela quien le introdujo en la cocina nacional a manera de juego.
Fuente: Chefs del Ecuador 2012 - La cocina Ecuatoriana preparada por 27 chefs